¡MENUDAS CARRERAS!

Han pasado un par de carreras sin escribir nada, pero es que lo bueno se hace esperar, porque ¡menudas carreras buenas!


Comenzamos con el Campeonato de Madrid de Mtb en Alcalá de Henares. Nos presentamos allí en plena ola de calor y sin conocer el circuito, me esperaba poca sombra, mucho calor y un recorrido poco atractivo, pero con los ánimos por todo lo alto después de mi 8º puesto en la anterior carrera del campeonato.

Tras recoger el dorsal comienzo con el reconocimiento del circuito, y me sorprende gratamente que no solo hay más sombra de lo que esperaba, sino que hay mucho sendero y bastante desnivel, que hacen que a pesar de no ser un recorrido técnico si es bastante divertido y duro.

Ya calentando, el calor se hace más que patente y poco antes de la salida, que era a las 12h, me tengo que poner en una sombra porque ya me está subiendo mucho la temperatura. Allí, mientras estiro ya se ve que el calor va a hacer la carrera muy dura, así que decido que de principio a fin mi objetivo será olvidarme de los puestos y pensar sólo en terminar.

En línea de salida voy cargado con un bidón grande con sales para beber y otro de tamaño normal de agua sola para echármelo por encima durante la carrera. Dan la salida y en el primer gran repecho elijo una trazada distinta al resto del grupo, que me hace ganar muchos puestos y colocarme entre los primeros. Yo siempre prefiero coger rueda y que el ritmo lo impongan los demás. En este caso estoy aguantando bien el ritmo de cabeza, pero tras un par de repechos prefiero apartarme un poco y respetar mi decisión inicial de olvidarme de puestos y pensar tan solo en terminar. El grupo se empieza a escapar e incluso me adelanta algún corredor.

Cojo mi ritmo y ya en la primera vuelta el calor se hace insoportable, !39 grados ni más ni menos! Hay subidas en las que la temperatura te sube muchísimo y no me arrepiento en absoluto de mi táctica, el calor lo llevo muy mal y hoy tengo que reservar todo lo que pueda para poder terminar.

Van pasando las vueltas y nos empezamos a mezclar los corredores de las diferentes categorías, coges corredores que han salido antes y te alcanzan algunos corredores que han salido después, mientras que ya vas viendo ciclistas parados en las sombras intentando reponerse del calor.

A mi  me está costando muchísimo seguir en carrera, no paro de beber, de echarme agua, de que me tiren agua los espectadores y no hay manera de que se quite ni un poco del sofocante calor que llevo encima. Pero cada vuelta que permaneces en carrera son puestos que estás ganando porque se está retirando mucha gente.

Por fin termino la quinta y última vuelta, y nada más pasar por meta voy corriendo a entregar el dorsal para buscar una sombra en la que empaparme de agua. Consigo bajar la temperatura bastante bien mientras que voy contando todo lo que he bebido. Los dos bidones que llevaba en la bici están vacíos (y eso que al final bebías agua caliente), he cogido dos botellitas del público enteras más otros tantos que me han ido remojando por el camino... Habrán sido unos tres litros en poco más de una hora ¡Qué barbaridad!

Ni siquiera se aproximadamente cómo he podido quedar, pero me da igual, estoy muy orgulloso de haber sabido enfrentarme al calor, soportar las duras condiciones que nos hemos encontrado y no rendirme. Estoy realmente contento.

Por cierto al final puesto 12, muy buen lugar.

Al fin de semana siguiente teníamos ora gran cita, el Superprestigio Caja Rural llegaba a Madrid y la carrera se disputaba en Moralzalzal, muy cerca de casa. Es un campeonato de los de más nivel en el ámbito nacional y participan corredores de renombre. No podemos faltar.

Unos días antes, en el descanso del trabajo voy a ver el circuito. Cómo se nota que es una carrera importante, quedan 4 días y ya está todo señalizado y balizado. El recorrido es muy bueno para mi, subidas duras, sendero y bajadas fuertes. Recuerda un poco a los circuitos de antes, los auténticos, creo que lo voy a pasar muy bien.

Me encuentro con otro corredor que también está dando vueltas y ya se deja ver el nivel de la competición. El me va hablando tranquilamente y yo callado apenas le puedo seguir el ritmo...

El día de la competición el ambiente es extraordinario. Muchas carpas, muchos arcos por la zona de meta, vallado publicitario... y el plantel de corredores es mucho más. Carlos Coloma, bronce en las olimpiadas de Río, Catriel Soto, Campeón de argentina y corredor olimpico, Raiza Goulao, campeona de Brasil y también corredora olímpica son algunos de los presentes en categoría élite.

En línea de salida veo que en mi categoría el panorama no es mucho peor, el recién coronado campeón del mundo en mi categoría sale delante mío, y a su lado un corredor venido de la selección colombiana que ha venido para coger puntos UCI.

Viendo el nivel y lo corto que es el circuito, mi estrategia de hoy es salir a tope desde el principio para evitar ser doblado y poder completar las 5 vueltas. La salida fue todo lo opuesto a la del fin de semana anterior. En el primer repecho escogí una trazada distinta al resto para evitar tapones y fue un terreno tan malo que la rueda no agarraba nada y tuve que echar pie a tierra y andar hasta la trazada buena. Bien empezamos, ya soy el último.

Me cabrea un poco pero no me quita los ánimos, hay que arriesgar y no siempre sale bien. Pedaleo fuerte, entre otras cosas porque el ambiente del circuito hace que no cueste tanto como de costumbre y alcanzo el grupo de los últimos corredores. Me mantengo con ellos y sorprendentemente les dejo atrás en la siguiente subida.

Las dos primeras vueltas las realizo a un gran ritmpo, hoy hace muy buena temperatura, estoy cerca de casa, el circuito es divertido y estoy con la moral a tope. Con los corredores que he adelantado debo andar en torno el puesto 11-12, pero ya sólo veo un corredor asturiano a lo lejos, difícil de alcanzar.

Tras una de la bajadas, el corredor que me precede está bastante más cerca, y en la siguiente subida le alcanzo con tal facilidad que le rebaso. ¡Estoy que me salgo!. En el llano antes del paso por meta me alcanza fácilmente y vamos juntos un rato. Empiezo a sacar la calculadora y parece estar todo controlado, subo y bajo mucho mejor que él así que en esta vuelta le descolgaré con facilidad... ¡Pues no!

En las subidas se queda atrás, pero en antes de llegar a las bajadas, me vuelve a alcanzar. En las bajadas me escapo, pero de nuevo me alcanza más tarde. Yo no soy bueno en el llano, pero el está muy fuerte en ese terreno. Ya estamos en la cuarta vuelta y en la primera subida me fuerzo un poco y le dejo bastante atrás, con la mala suerte que un poco más alante se me sale la cadena y tengo que parar. Por supuesto, me adelanta y le pierdo de vista.

Ya doy por perdido ese puesto, queda una vuelta y media. Sin embargo, en la última bajada antes de meta ¡lo tengo a la vista de nuevo!. En el paso por meta le alcanzo y vamos más o menos juntos la última vuelta. Nos vamos controlando tanto que apenas nos damos cuenta de que otro participante nos ha pasado uno como un misil.

En la primera parte de la última subida ataco con todo lo que me queda y le consigo dejar bastante atrás, parece que tengo el puesto controlado y me voy reponiendo poco a poco. Cuando me quiero dar cuenta, le tengo pegado y atacando fuerte, mis piernas aún no se han repuesto y no le puedo seguir, se me escapa y me siento totalmente timado, creo que ha sido bastante más listo que yo y ha jugado conmigo. He aprendido la lección.

La meta ya está cerca y él lejos. Ha sido una pena, pero estoy muy contento y los últimos metros son para recapitular. He ido a tope de principio a fin, ni rastro de que el campeón del mundo pudiera doblarme, he adelantado bastantes corredores y he luchado con otros. Ha sido un gran día en una gran carrera. Además, decimotercero en una carrera importante.

Ahora voy a descansar unos días y ver qué carreras hay por ahí. Se han acabado ya los campeonatos de varias carreras y empiezan las pequeñas maratones, alguna habrá que hacer.

Ya os iré contando. ¡Feliz verano!

Gracias por seguirme!!!