He tenido que esperar muuucho tiempo hasta que la climatología por fín me ha dejado salir ha hacer un entreno de larga distancia, y hoy ha sido el día D.
La salida ha sido a las 8 de la mañana, justo al amanecer, entre niebla y algo de lluvia. Después el tiempo a mejorado, y aunque tampoco salía el sol, ni llovía ni hacía frío.
El plan de hoy ha sido un pequeño simulacro de lo que voy a tener que hacer en Lanzarote. Allí tendré que hacer un par de paradas largas, tanto por el recorrido en Ferry, como por la parada que haré a medio día para comer (No puedo hacer 300 km alimentándome sólo de barritas y geles). Así que hoy he dividido la salida en dos partes, una primera de 75 km y una segunda de 55 km, con una parada entre medias en casa para comer.
La experiencia de parar, comer bien, sentarte a gustito y luego tener que volverte a subir a la bici no es nada recomendable. Te entra mucha pereza y con las piernas frías cuesta mucho hacer los primeros kilómetros.
Al final he hecho 130 km muy buenos, en casi 7 horas y con 1400 metros de desnivel positivo. He acabado de noche y haciendo el último km con la rueda trasera pinchada, porque no me apetecía ponerme a arreglar un pinchazo viendo mi casa al fondo.
Estoy muy contento del entreno de hoy. De los 300 km que me esperan en Lanzarote ya estoy haciendo 130 ¡y en tan sólo 7 horas!
Ahora a buscar nuevo objetivo para la semana que viene.
Gracias y saludos!!!
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